La inundación
se produjo e consecuencia de una desobediencia. Un shuar, que se casado con una
Tsunki (diosa fluvial) luego de vivir con ella bajo las aguas de un río, donde
también habitaba su padre y otros miembros, fue a visitar a su antigua familia terrestre.
Para ello Tsunki se convirtió en una culebra (titink napi). El esposo la
mantenía oculta en un cesto. Un día en que se fue de caza el hombre prohibió a
sus mujeres mirar dentro del cesto; pero ellas no le hicieron caso. Al
destaparlo encontraron la culebra, la sacaron del cesto y le aplicaron un tizón
en el cuerpo.
Tsunki hizo un agujero la tierra y se fue donde su padre. Éste,
ante el maltrato de su hija, les mandó la inundación. El esposo de la Tsunki tomó
a una hija pequeña que tenía (es quien avisa al padre d delito cometido por las
esposas) y corrió hacia las montañas. Ascendió al cerro más alto y en él subió
a la palmera más alta, la ampakai. Hubo rayos, truenos, lluvia. Las anacondas
salieron de los ríos y se comieron a la gente. Las aguas inundaron todo menos
la palmera ampakai donde estaban el shuar y su hija.
Pasados
algunos días las aguas comenzaron a bajar, por lo que descendieron los
sobrevivientes. El shuar crió a su hija y se casó con ella. Por eso los shuar
sobrevivieron. Según una variante, cuando el shuar estaba en la palmera
ampakai, lanzaba pepas para saber si el agua había bajado lo suficiente para
descender.
No hay comentarios :
Publicar un comentario